sábado, 12 de diciembre de 2009

¡Feliz cumple Alfredito!

El hecho de tener que ir a pagar cosas ya rompe las pelotas.
Claro, ¿a quién carajo le puede gustar desembolsar dinero cada dos meses a cambio de la posibilidad de prender la hornalla rápidamente y sin necesidad de tener que hacer un fogoncito cada vez que a uno se le canta cocinar o poner agua para el mate? (Qué oración larga eh, y sin comas ni nada. Leéla en voz alta y se te pudre la garganta). Ni hablar de pelotudeces como el seguro que es algo que jamás te va a responder y como buena empresa llena de abogados te va a embocar en todo lo que pueda.
Pero he aquí que el problema no es pagar. Bueno, sí es, pero hay otras cosas también. Llegás a esos lugares de "pago rápido" y te chocás contra la realidad que reside en la ironía del nombre de los establecimientos. "Es el caso de publicidad engañosa más sonado desde 'La historia sin fin'", diría un amigo. Apenas entrás al lugar, una cola larguiiiiiiisima llena de viejas hablando del clima te advierte que si estabas apurado, mejor vuelvas otro día. Pero no podés volver otro día, porque es el ultísimo vencimiento y si no después viene la mierda de la reconexión y esas cosas. Tendrás que llegar tarde a pilates, entonces.
"¡Qué cosa los del servicio meteorológico, no pegan una! Hoy salí con paraguas y mirá el sol que hay"; "Sí, mi hija, la que estudia medicina, ¿vistes? Es un bocho la nena"; "No, por suerte no volví a tener hemorroides... ¡ay pero no sabés mi hermana Cuca!". Las conversaciones de la fila taladran tu mente, haciéndote perder poco a poco el deseo de vivir. Alguna vez oí historias sobre gente que conoció al amor de su vida haciendo la cola para pagar la luz. Salvo que tengas gerontofilia, es jodido, porque jamás van minas lindas a pagar las cosas. ¿Cómo es eso? ¿Te van a instalar el cable, y si estás buena te eximen del pago a perpetuidad? O capaz el pelotudo soy yo, que voy siempre a la sucursal enfrente al geriátrico. Cómo saberlo.
De repente, algo altera la paz del lugar. Un gordo hijo de puta que le reclama al empleado del local, puteandoló de arriba a abajo por el aumento exponencial en su factura de teléfono. A ver, imbécil, ¿qué culpa tiene el flaco que cobra de que los usureros de mierda de la empresa te aumenten las cosas? ¿o qué culpa tiene de que sin mediar aumento, la conchudita de tu hija se la pase hablando por teléfono con las amigas en vez de usar el msn, que es cuasi gratis? Pero no, el robusto hombre sigue sin entender, y no conforme con romperle las pelotas al cobrador extiende su negativa influencia a la vida de los demás pobres diablos que estamos detrás en la cola.
Luego de recordar para tus adentros los nombres de todos tus compañeritos de jardín como método para entretenerte, llega el orgásmico momento de acceder por fin a la ventanilla. Oh yeahhhh, sentís que estás viendo a Dios detrás del vidrio, que te va a elevar sobre el mar y a mostrarte las delicias del universo... pero algo te vuelve a la Tierra. Es la monolítica cara de ojete del empleado, que siempre, vayas a donde vayas, padece de avanzada calvicie y te recibe con toda la mala onda que cabe en una habitación. Hay que entenderlo, soporta durante todo el día a especímenes como el gordito reclamón, gente que garpa todo con cien mangos y boludos que se olvidan cosas. Aún así, ¿es necesaria esa expresión anal para atenderte? No hay derecho: encima que vas a pagar (acto inherente a la existencia capitalista que nadie puede disfrutar), te hacen esperar y te atienden como el orto. ¿Dónde está la Justicia en el mundo, dóoondeeee? Si Supermán existiera realmente, ya nos habría ayudado.

viernes, 11 de diciembre de 2009

Me rompe las pelotas poner títulos



¿Who wants to make some money? preguntaba afablemente el negro, el gordo, la rubia o quien fuera el animador de turno. Acto seguido, decenas de yanquis gritando como siempre (algo así como "whooooo!!!!") se peleaban por ser quien se rebajara a hacer alguna idiotez realmente repugnante a cambio de unos minutos en tevé y unos pocos dólares.
Si bien ya para esta época tenía rechazo por MTV, me recuerdo alegremente como espectador de este programa, al que veía en el tiempo que podía hacer cosas mucho más útiles como memorizar la guía telefónica o aprender a masturbarme con la mano izquierda. Qué le vamo a hacé.

jueves, 10 de diciembre de 2009

Ya probaste el chiquito

Varios miembros de Ave Investiga recibieron amenazas luego de la publicación de la existencia de Los protocolos de los sabios de Copiapó, ese documento que prueba que una logia chilena conspira contra nuestro país, pergreñando una lenta y silenciosa conquista.
Uno de nuestros avezados investigadores encontró en una revista una foto del tenista Marcelo Ríos haciendolé fáquiu. Otro, fue a comer a un restorán mexicano y le pusieron en la comida un chile picante. Un tercer investigador chocó en su auto contra otro en O'Higgins entre Mendoza y Juramento.
¿Coincidencia? ¿Fatalidad? ¿Más pruebas de este complot? Nos importa un carajo. Nos importa un carajo porque desde aquí hacemos pública la existencia de esta conspiración, para que abramos los ojos y no nos dejemos engañar. Hay intenciones ocultas detrás de todo lo que vemos. Defendamos nuestra patria.
En la entrega de hoy:

El fútbol
El fúlbo, deporte nacional por excelencia, es uno de los objetivos más importantes de este complot trasandino. Es por eso que desde hace tiempo, están invadiendo los equipos de nuestro torneo local con sus jugadores y, lo que es peor, algunos llegan a convertirse en ídolos. Recuerden si no a Marcelo "El Matador" Salas, figura de aquel River Plate de Ramón que se ganaba todo. También hubo y hay otros con menos gloria, como Milovan Mirosevic, Waldo Ponce, Raúl Ormeño o Gary Medel. De esta manera, aprenden nuestras costumbres, nuestros virtudes y debilidades, y envían periódicamente informes a sus superiores contandolés los pormenores de la cotidianeidad argentina.
Pero no sólo eso, también se llevan a jugadores nuestros para adoctrinarlos y chilenizar sus mentes. En este momento se me vienen a la cabeza mi amigo Raúl "Pipa" Estévez, o Marcelo Espina. Habría que buscar más; los hay. Debemos rescatarlos cuanto antes de las garras del cóndor rojo.
Otro caso es Claudio "Bichi" Borghi, un entrenador que me cae muy bien y por eso lamento que esté siendo manipulado por ese plan diabólico. Seguramente bajo amenaza, porque sé que es un buen pibe, opera disimuladamente a los jugadores de sus equipos con el fin de convertirlos al lado oscuro de la Fuerza. Tan sigiloso es el trabajo, que casi no nos daremos cuenta cuando el equipo de La Paternal cambie su nombre y pase a llamarse Asociación Atlética Chilenos Juniors.
Dejamos para lo último a otro director técnico que respeto enormemente, Marcelo Bielsa. "El Loco" fue contratado por la Federación de Fútbol de Chile para entrenar al seleccionado mayor. No contentos con este abierto saqueo al balompié argento, hay quienes lo proponen como Presidente de la República. Claro, creen que así será más fácil anexar Argentina a su nefasto imperio, pero no. No lo corromperán tan fácil. Mientras, empleemos el tiempo hasta la próxima entrega en desempolvar el viejo rifle del abuelo; lo necesitaremos pronto.

miércoles, 9 de diciembre de 2009

Ahora que tengo plata me compré dos delfines

Los capítulos nuevos de Los Simpson son una mierda.
Las voces son una cagada, particularmente Lisa y Homero.
Los argumentos son una pelotudez, se quisieron aggiornar y les salió para el carajo.
Hasta la animación me resulta tan fría y lejana, que junto a la gran chotez que resultan estos nuevos episodios en su conjunto, hacen que no me den ganas de mirarlos, y me confino a ver una y otra vez los viejos, que me hacen realmente feliz.
Los capítulos nuevos de Los Simpson son una poronga.

domingo, 6 de diciembre de 2009

No se puede encontrar el servidor

Facundo llegó a su casa ese mediodía y antes de comer, se sentó frente a la computadora. Abrió su Facebook para ver si alguno de sus 1742 amigos lo invitaba a alguna fiesta para el fin de semana. Tenía para elegir entre varios festejos de cumpleaños, así que decidió pasar un rato por cada uno. Aceptó diez o quince nuevas solicitudes de amigos y fue a hacerse la comida, ya que su mamá llegaba muy tarde a casa luego de una larga jornada en la oficina.
Se acordó que hacía mucho no hablaba con su papá, quien estaba separado de su madre hacía un par de años y se había mudado a otra ciudad. Después de comer le mandó un e-mail preguntándole cómo andaba.
Pasó esa tarde sin hacer demasiado, charlando de cualquier cosa con desconocidos vía chat. No se llevaba muy bien con sus compañeros de colegio; no le importaba, gracias a internet conocía gente de todas las escuelas, que le firmaban el Fotolog y el muro del Facebook riéndose de sus ocurrencias y comentando la fiesta de la noche anterior.
Cuando llegó su mamá, le dijo que no cenería en casa porque se iba a reunir con unos chicos a festejar que Hernán, uno de ellos, había aprobado una materia que tenía previa. Volvió de la casa de Herán un ratito antes del amanecer, con el tiempo justo para lavarse los dientes, vestirse y tomarse el colectivo para ir al colegio. Ya habría tiempo de desayunar más adelante.
Cuando se montó al ómnibus se sentó atrás de todo, con la idea de dormir un rato. Pero justo en la parada siguiente vio subir al colectivo a una amiga de otro colegio, que le dio charla todo el viaje y no lo dejó ni juntar los párpados.
Al regresar del colegio, cansado, revisó los mensajes en el contestador automático, y había uno de su tía. Lo oyó sin prestar demasiada atención al principio, pero las palabras lo dejaron helado. El llamado era para avisar que su papá había tenido un accidente en el auto, y que estaba internado en estado de gravedad.
Facundo no quiso avisarle a su mamá para no preocuparla, pero de inmediato se tomó un colectivo hasta la ciudad donde su padre vivía, para ver cómo estaba. Durante el recorrido no pudo evitar sentirse culpable por el tiempo que hacía que no hablaba con él, que no lo veía, que no compartían un momento por simple que fuera.
La hora y media de viaje que separaba ambas ciudades se hizo transcurrió lenta, insoportable. Y cuando llegó al sanatorio, el mundo se derrumbó: a los 17 años se había quedado sin papá.
Las siguientes fueron semanas difíciles para Facundo. Ahora nada más le quedaba su mamá, a quien veía sólo en la cena, y no tenía a nadie más con quien compartir su dolor. De la gran cantidad de contactos que tenía en el Messenger, ninguno se prestaba para oírlo, ni siquiera para leerlo. Se detuvo un momento a pensar quién era su mejor amigo, para ir y desahogarse con él; no tardó mucho en darse cuenta que no tenía. No amigos, sólo conocidos.
Cuando se cumplió un mes de la muerte de su padre, Facundo se sentó frente a la computadora. Abrió su Facebook para ver si alguno de sus 1800 "amigos" lo invitaba a alguna fiesta para el fin de semana. Tal vez así se despejaría un rato.

lunes, 30 de noviembre de 2009

Señor, mete la mano

Siempre digo que es preferible comerse las eses antes que comerse las heces.

viernes, 27 de noviembre de 2009

Como la vida misma

Continuamos revelando Los protocolos de los sabios de Copiapó, ese terrible documento que sirve como prueba de un perverso complot de parte de un grupo de intelectuales chilenos para apoderarse de la Argentina. La locomotora arrancó, ya no se puede detener. Hoy:

La música
A lo largo de la historia la música chilena ha sido utilizada como medio para difundir las ideas. Si pasan mensajes satánicos al revés, ¿por qué no iban los sabios de Copiapó a expresarse a través de pasar al reverso los LP? El tema es que la juventud de hoy resulta incapaz de decodificar esos mensajes.
Por ejemplo, ellos también tuvieron su "Nueva Ola", la cual afortunadamente no llegó aquí porque teníamos una mejor (o peor, no sé cómo valorarla), pero que tenía letras que hablaban de cosas como "la expansión del ser", "te quiero robar a la novia" o "no consigo trabajo porque la oferta laboral es escasa relacionada con la amplia demanda de parte de obreros no calificados". Muy sutil, sí, pero pesado.
Otro caso es la realización en 1970 del Festival de Piedra Roja, una copia horrenda de Woodstock que no culminó en nada bueno y demostró la patética admiración por el pueblo estadounidense. Pero además, un análisis exhaustivo de las fotos del evento permitió descubrir pancartas entre la multitud con las leyendas "Mendoza", "San Juan", por ejemplo. Sin dudas son las provincias que planeaban anexar aprovechando la gran masa de gente que se había formado, pasible de ser utilizada como ejército popular.
Ni hablar de La Ley. Ya desde el nombre, están queriendo imponerse como la posta, lo que está por encima de los demás. Con ese tema que dice "...sin dolor no te hacés feliz", están llamando a su pueblo a tomar las armas, a resignar su bienestar personal en pos de la grandeza de la nación. Además, Beto Cuevas, quien fuera su líder, tendría el cargo de vocal en las reuniones de los sabios. Con ese peinadito, ni para consonante le da.
Para terminar, el caso de Kudai, que si bien nunca lo escuché se me hace una especie de Miranda, de banda que enajena a las multitudes con melodías locas y los hace olvidarse de su entorno. Esas melodías estarían diseñadas (consta en los protocolos) para distraer a las juventudes argentinas para que no puedan defenderse mientras ellos ingresan sigilosamente al país y se van apoderando de cada provincia, rodeando a la capital para sitiarla e imponer sus condiciones. No lo permitiremos, banquemos a Miranda, que es una mierda pero al menos es nuestro.

jueves, 26 de noviembre de 2009

"Feliz Domingo" es una contradicción

Will it blend?



Gracias a nuestro compuespectador Sapo quien nos envió esto. Se trata de una serie de videos, patrocinados por una marca de licuadoras, en la que este chabón de anteojitos se divierte comprobando el poder del aparato de licuar con los objetos más diversos. Da paja que esté en inglés, pero aunque no manejes la lengua de Yéikspier podrás disfrutar de la cara de verdadero goce del tipo cuando mete cosas a la licuadora.
Tú también puedes participar en nAVEgando, enviando algún video o página que resulte destacable. Así tomarás parte además en un sorteo por la banda sonora de Los Halcones Galácticos, y una caja de Viagra con pequeñiiíisimas fallas.

miércoles, 25 de noviembre de 2009

Tu mamá en tanga

Transcripción de mis pensamientos durante un viaje en tren, Ferrocarril Roca, Ramal Constitución - La Plata, hoy a la mañana.

Uh qué paja, está lloviendo. Encima la pelotuda que está sentada adelante en vez de cerrar la ventanilla saca la mano divertida de cómo llueve. Es agua que cae del cielo, imbécil, ¿qué tiene de divertido? Cerrá la ventanilla que se me moja mi sensual torso. Ah ahí decidió subirla. Bien. Uh, se le trabó. La puta madre del mundo, confabulado para mojarme y que me enferme y me dé tos. Qué bueno que ese señor la está ayudando. Gracias señor, usted está de mi lado en mi batalla contra el universo.
Mmmm ese ciego que pasó pidiendo tenía reloj. ¿Para qué lo quiere? ¿Cómo hacen los ciegos para vestirse? ¿Se dan cuenta si mean la tabla? Yo creo que sí, por el ruido, pero vaya uno a saber. Pero pobre ciego, casi se cae por culpa de ese corqui que estaba sentado con las piernas estiradas hacia el pasillo. De pedo otro flaco lo vio y le avisó que se estaba por tropezar con dos pezuñas que había por ahí.
Jajaj, son las 9 de la mañana y pasó el chabón de las bebidas vendiendo entre otras cosas, cerveza. No tengo nada contra el etilismo matutino, pero creo que chuparse una birra a esta hora es alcanzar un punto sin retorno. De ahí, derechito a las reuniones de doble A; nada te detiene. Próxima estación: whisky con medialunas a la mañana. Mmm, ¿es medialunas o mediaslunas? Voto por la primera opción. Igual debe ser una pelotudez de esas tipo yogur o yogurth, o "pisa", "picsa" o "pitsa". Un dilema de nunca acabar.
- ¡Braian, vení que ya nos bajamos!
Pero la puta madre, ¿por qué le ponen esos nombres a los pibes? ¿no se dan cuenta que queda espantoso? Brian, Jonathan, Jeniffer... no pegan con nuestro bello idioma. Claro, salvo que se llamen "Brian Summers", ahí tendría más sentido, pero en este contexto lo más probable es que sea un "Brian González". Sin ofender, eh.

sábado, 21 de noviembre de 2009

Redondea esta cifra a la decena más próxima

¿Ya estoy realmente quemado, o efectivamente hay cierta variedad de detergentes que tiene olor a Gancia?
Tomenló como consigna, si quieren.

jueves, 19 de noviembre de 2009

En un coiffeur de seccional

Hoy mientras iba a pagar el codificado llegué a contar cuatro (4) personas tirando basura en la vereda. Nimiedades: un papelito de chicle, un boleto de bondi, un cancionero con acordes para guitarra de los temas de Airbag. La cosa es que uno se queja de los de arriba, o de los barrenderos, echandolé la culpa a ellos de lo mugrienta que es la sociedad. Pero la posta es que nosotros somos responsables, y tenemos que empezar a cuidar un poquito más lo nuestro.
Otro ejemplo: el edificio de mi facultad es una construcción de apenas dos años. Sin embargo, tanto los baños como otras paredes interiores ya presentan un sinnúmero de escritos. A ver, ¿qué carajo me importa que "El Pincha corre", o "La 22 cobani, Estudiantes manda"? ¿Es necesario llenar los muros de "Perón, Evita, la patria socialista"? Seguro que si esos pibes fueran a una privada no lo harían, "porque pagan la cuota". Bueno, ¿y acá? Esta facultad la pagan todos los argentinos ("y argentinas"), no existe la más mínima necesidad de escribir pelotudeces en ningún lado más que en los papeles. Ah y eso que somos todos universitarios, gente bien y con un pensamiento crítico e inteligente.
Ni hablar de los transportes públicos, que a pocos días de estar en circulación ya están cubiertos por el "arte" de la muchachada. "Berazategui kapo del sur", "rojo campion", "Yoli te amo", pueden leerse entre otros trascendentales mensajes. Pero lo de escribir resulta simpático al lado de los que rompen las ventanas, los asientos y demás objetos y después dicen "ah empresa hija de puta que no arregla las cosas". Seguro que esos hasta se colan siempre para no pagar boleto.
Anécdota personal: una vez, hace unos años, iba por una avenida y vi a una mujer tirar un Blem por la ventanilla del auto en movimiento. ¡Un Blem! ¿Puede ser alguien tan imbécil? Después preguntan por qué hay gente pesimista acerca del género humano.
Plazas, monumentos históricos, calles, veredas... cosas que no son de nadie, y a la vez son de todos. Nadie las cuida, y todos las maltratan.
Mientras tanto, seguimos existiendo los boludos que guardamos el papel del alfajor en el bolsillo y esperamos a encontrar un tacho o a llegar a casa para no enmugrar el país. Vamo a ver si cambia todo algún día.

martes, 17 de noviembre de 2009

Bárbaros, las ideas no se matan

Seguramente muchos de ustedes hayan oído, leído o palpado algo sobre un complot de la colectividad judía para conquistar el mundo. Bueno, sabemos que es mentira, ya lo habrían hecho si quisieran: están todo el tiempo en la tele, controlando lo que vemos, dandonós las noticias, relatando los partidos de nuestro equipo. Pero no vine aquí a hablar de los Samueles, de los Davides ni de los Abrahames, no.
El equipo de Ave Investiga (gente al pedo financiada por no sabemos quién), halló unos documentos que detallan ciertas reuniones llevadas a cabo en la ciudad de Copiapó, en la vecina República de Chile. Estos archivos, denominados justamente "Los protocolos de los sabios de Copiapó", son prueba fiel de que existe un verdadero complot de parte del pueblo chileno para apoderarse de la Argentina.
A modo de primicia, el peculiar descubrimiento se irá publicando por etapas en este medio, dando a conocer los distintos aspectos sociales, culturales y territoriales en que esta logia secreta pretende invadir nuestro país y destruirnos.
En la entrega de hoy:

Alianzas Matrimoniales
Los sabios de Copiapó enviaron a algunos de sus compatriotas a casarse con destacadas personalidades argentinas a fin de usar ese vínculo en provecho de la causa. La convivencia permitiría ayudarlos a conocer más sobre nuestras costumbres, y darles la posibilidad de un leve adoctrinamiento diario para el cónyuge.
Uno de los casos más resonantes fue el del casamiento de la ex Miss Universo Cecilia Bolocco (mejor ni pensar cómo llegó a ese galardón) con el miembro de nuestra aristocracia y ex gobernante Carlos Saúl I. No contenta con eso, lo obligó a mezclar sus materiales genéticos para engendrar un hijo, a quien utilizaría como medio para llevar a cabo la chilenización del ex mandatario.
Otro ejemplo es la unión entre el vecino trasandino Benjamín Vicuña con nuestra modelo local Carolina "Pampita" Ardohain. ¡Justo ella, el símbolo nacional, "la morocha argentina"! Una modelo que representa más el ser nacional que esas sajonas de Nicole Neumann o Ingrid Grudke, que hasta nombres extranjeros tienen. Pampita era nuestra, era del pueblo, y se la llevaron ellos. ¿Ven? Eso es el complot.
Próximamente les traeremos más sobre esta conspiración de este país satélite de los Estados Unidos para con nosotros.

sábado, 14 de noviembre de 2009

¿Me da un litro y medio de tapa de asado?

Más que interesante esta propuesta de la Junta de Extremadura, en España, que consiste en una campaña para enseñar a masturbarse.
Estas son nuestras raíces, de aquí venimos.

Whisky y guantes de látex


El mediodía de hoy me encontró en un hipermercado, en la cola de la "Caja Rápida. Máximo 10 unidades - Prioridad Embarazadas y Discapacitados".
Cuando me uno a la fila, de más o menos 20 personas, noté que la cajera era muuuuy parecida a Agustina Cherri. Entonces me empecé a acordar de Grande Pá, y mi infancia empezó a pasar frente a mis ojos como una película...
Bueno pero no iba a eso. Volvamos a la cola en la caja. Día de calor, paja de tener las cosas en la mano, irritación porque todos pagan con tarjeta y tardan bocha, impotencia porque aumentó el picado fino, tristeza porque se separaron los Hanson. Muchos sentimientos se arremolinan en nuestras almas cuando esperamos ingenuamente a que nos atienda una pobre cajera a quien tienen en negro y la usan cual trapo viejo los pérfidos dueños de esa gigantesca empresa.
Tan sumido iba en mis pensamientos, que no noté que ya estaba bastante cerca de la meta final. Claro, uno va avanzando como un autómata, como las vacas hacia el matadero, y no se da cuenta si avanza, si retrocede o si se le cola el plantel entero de Comunicaciones.
Pero a veces sí te das cuenta. Porque cuando solamente mediaban cinco personas entre la caja y yo, aparece por el costado y de improviso un muchacho de unos veinticinco años, llevando a otro de una edad similar, o quizá más chico, en una silla de ruedas.
Entiendo que la caja dice "Prioridad Embarazadas y Discapacitados", y no pretendo que esos jóvenes hagan la cola larga larga que se había formado. Pero en mi desconfianza, lo primero que pienso es que el chabón tenía que ir a comprar dos boludeces al supermercado y le dijo al hermano más chico, quien estaba sentado en su silla de ruedas: "Che Carlitos, acompañame a comprar birra así no tengo que hacer la cola".
Ojalá esto no fuera así, ojalá fueran dos hermanos o dos amigos muy unidos, que van juntos a todos lados y el muchacho solamente está haciendo uso de un derecho que me parece muy importante que posea. Tal vez sea así, seguramente sea así.
Pero cuidado, hay mucho garca dando vueltas.

jueves, 12 de noviembre de 2009

Saracatunga queremos con vos

Estimado lector:
Al mismo tiempo que usted lee esto, están naciendo en todo el mundo alrededor de cien mil nuevos pelotudos. Qué bueno, ¿no?
Cien mil nuevas personas que estacionen en doble fila. Cien mil nuevas personas que dejen abierta la puerta del ascensor. Cien mil nuevas personas que sean mala leche jugando al papi. Cien mil nuevas personas que no te presten una lapicera. Cien mil nuevas personas que dividan, con centavos y todo, lo que hay que poner para el escabio. Cien mil nuevas personas que estén dos horas en el quiosco para pedir algo. Cien mil nuevas personas que pregunten pelotudeces en clase cuando ya te querés ir. Cien mil nuevas personas que le pidas cosas y se olviden. Cien mil nuevas personas que se ofendan si les hacés chistes. Cien mil nuevas personas que hagan escenas de celos. Cien mil nuevas personas que te vayan a dejar colgado por la novia o el novio. Cien mil nuevas personas que te hablen horas y horas de pelotudeces que no te importan. Cien mil nuevas personas que puteen a un árbitro porque no cobra lo que quieren. Cien mil nuevas personas que no presten atención cuando manejan. Cien mil nuevas personas envidiosas, cargosas y con malas vibras. Cien mil nuevas personas testarudas, molestas e irritantes.
Cien mil nuevas personas que hacen de la impracticidad una forma de vida, y no conformes con eso, nos rompen las pelotas a nosotros buscando hacer más espantosa nuestra existencia.
Y si releés esto, van a estar naciendo cien mil más. El ciclo nunca se acaba, porque como dijo Keanu Reeves esa noche en Cocodrilo: "Boludos y hormigas nacen todos los días".

miércoles, 11 de noviembre de 2009

Odio las botas de caña alta

Soñé anoche que entraba a mi pieza y encontraba teniendo sexo a Nadia, la que da el clima en Canal 7. No logro recordar con quién.

Si un psicólogo leyera esto, ¿qué pensaría? ¿que me calienta el acento ucraniano? ¿que tal vez debiera ponerle cerradura a mi habitación para que no entre gente de la tele a coger? ¿que soy oficialista porque sueño con trabajadores de Canal 7? ¿que tengo un fetiche con la meteorología? De ser así, ¿debería autosatisfacerme con un paraguas?
Por eso, para cuidar mi esfínter, nunca me acuesto en el diván.

martes, 10 de noviembre de 2009

Si le ponés Casancrem a la comida, no vuela



En alusión al "efecto jazz" de fines del año 2008, los hermanos Frederick y Francis Ford Avenali realizaron este cortometraje reflejando la dura situación vivida a nivel mundial.

sábado, 7 de noviembre de 2009

No me gorilee eh

Si bien siempre me manifiesto en contra de los "días de..." (no de los desembarcos en Normandía, sino de, por ejemplo, el Día de la Madre, del Veterano y de los Caídos en la guerra en Malvinas, del Maestro, incluso del Día del Arquero), aprovecho esta ocasión, 7 de noviembre, en que se celebra el Día del Canillita, para destacar algunos laburos que me parecen enormemente nobles.
Entiendasé por noble aquel trabajo que, entre otras cosas, presta un importante servicio a la comunidad; que lamentablemente, en general, recibe menos remuneración de la que debería dada su nobleza; y que quienes lo realizan pueden dormir tranquilos por la noche, con la conciencia limpia y sabiendo que están haciendo algo bueno por el país.
Por otro lado, existen los laburos innobles, parásitos de la sociedad que cegados por el afán de lucro se olvidan de los demás y se vuelven una carga para todos. O a veces ni siquiera lucran, pero están al pedo y molestan a la gente.
Entonces aquí ofrecemos, a modo de listado, los oficios nobles y los innobles, para que puedan objetarlos, agregar nuevos y luego, si las circunstancias lo permiten, ponerlos en el super pancho como condimento. Cada uno está en las listas por una razón.

NOBLES
Canillita
Chofer de bondi
Vendedor ambulante en el tren
Pochoclero
Vendedor de choripan
Volantero
Cartero
Almacenero de barrio
Maestro de escuela
Peluquero de barrio
Médico
Sastre
Profesor
Zapatero
Mozo
Bibliotecario
Ingeniero
Jardinero
Músico
Portero de edificio
Publicista
Albañil
Bombero
Dibujante

INNOBLES
Abogado
Escribano
Periodista
Empleado de ANSES
Telemarketer
Psicólogo
Dirigente deportivo
Modelo
Gestor
Psicopedagogo
Acomodador del cine
Meteorólogo
Tachero
Grafólogo
Tarotista
Kinesiólogo
Gasista, electricista, etc.
Garita
Contador


Seguro que con el tiempo irán surgiendo más; serán añadidos.

viernes, 6 de noviembre de 2009

Los argentinos somos Derechos y Humanos

Hoy entró en vigencia en la Provincia de Buenos Aires la ley 14.050, llamada también "Ley de Nocturnidad". Esta ley, destinada a calmar a la muchachada durante las noches y evitar los quilombos que están sucediendo alrededor de los boliches y locales bailables, no es el remedio sino que terminará formando parte de la enfermedad.
"Esta ley trata de hacer una noche más amigable para los chicos. De ninguna manera pretende prohibir la noche" dijo el ministro de Desarrollo Social de la provincia, Baldomero Alvarez de Oliveira. ¿Amigable? ¿De qué habla? No hay nada más amigable que un borracho, que va por la vida saludando a todos, hablando con cuanto ser humano y no humano se le cruce y abrazandosé con desconocidos. ¿Van a terminar con eso? Si lo que buscan es crear autómatas mala onda, aburridos, que no bailen sobre las mesas ni canten canciones de cancha sin sentido, eso es lo que lograrán.
No se va a poder entrar a ningún bar o bolichongo después de las dos de la mañana, ¿se imaginan? Te juntás a merendar con los pibes a la tarde, empezás a mechar el mate con fernet y a las 11 de la noche ya estás saliendo. Porque sí, hay mucha gente que vive a la vuelta del bar al que va frecuentemente, pero hay otros que se viajan kilometrísimos para irse de joda. ¿Si vivís en Avellaneda y vas a ir a bailar a Ramos Mejía? ¿Si sos de Varela y planeaste ir a pachanguear a La Plata? ¿Qué pasa si vivís en Barrio Alfar y querés ir a un boliche de Constitución, en Mar del Plata? Sí, lo que imaginamos: tenés que salir de tu casa a las cinco de la tarde. Qué lindo, eh.
El tema del horario de salida a las 5.30 (pasible de ser estirado hasta 6.30, por razones estacionales y/o regionales), que ya lo he experimentado hace unos años, resulta bastante choto. No hay nada más feo que irte porque te echan en lugar de porque vos querés. Como todo el mundo sale a la misma hora, es un quilombo conseguir tacho o remis si es que sos un burgués sin conciencia. Y si sos alguien del pueblo que se vuelve a la casa en bondi, te cagás de frío esperando y seguramente te afanen unos muchachos más del pueblo que vos. Además, uno piensa que va a seguir la joda y que vamos a terminar todos bailando y participando de frondosas orgías en la calle, cagandonós en Scioli y sus amigos. Bueno, no: cierran los lugares y todo el mundo se va a dormir. Comprobadísimo.
Hay algo de lo que no se habló en ningún medio: por el artículo 19 quedan prohibidas las canillas libres. Sí, joven y avezado lector, es correcto lo que interpretaste. Chau canilla libre, esa forma a la larga muy barata de embriagarse, ese compañero de la noche, ese buen amigo que siempre te acompañaba, y con el cual todos tenemos el anhelo de fundir el establecimiento. Pues eso se acabó.
Más allá de toda esta horrenda apología del alcoholismo que estoy haciendo, rescato la decisión de no permitir el expendio de escabio después de las 4.30: al terminar de chupar antes, es probable que tengas menos resaca y el "día después" sea menos traumático y espantoso. Tampoco se va a poder vender energizantes, que a algunos les pega para el orto y terminan pasando cosas complicadas como un accidente cerebro vascular. Así que bué, esas cosas las apoyamos.
De todas maneras, lamentablemente o no, esto durará sólo lo que la novedad. En unos meses va a seguir el carnaval, bares abiertos a las 8 de la mañana y gente ebria viajando en el mismo bondi en el que te vas a laburar. Los comerciantes, en especial los de la noche, tienen una gran habilidad para encontrar vericuetos gubernamentales donde insertar sus coimas, y los funcionarios otra gran capacidad para cobrarlas.
Esta ley no servirá para cambiar nada, sólo maquillar un poco. Mientras, el cambio de fondo que se necesita aquí, al igual que para tantas otras problemáticas, parece que nunca llegará. Por ahora, no nos quedará otra que acostarnos temprano: dura lex, sed lex.

jueves, 5 de noviembre de 2009

Ayer pasé por tu casa

¿Qué es de la vida de los de El fantasma escritor?



Si tenés mi edad y durante tu infancia no jugabas en la vereda porque la gran oferta televisiva de los '90 te mantenía horas pegado a la caja boba, seguramente también desperdiciabas tus tardes mirando "El fantasma escritor". ¿Te acordás? Ese loco programa, que iba por Discovery Kids antes que se volviera un canal para pelotuditos de 4 años (con Barney y Hi5 a la cabeza), en el cual un grupo de niños resolvía diferentes misterios ayudado por una especie de ánima que se comunicaba a través de las letras, tanto copiando mensajes como armando nuevos cambiando el orden de los caracteres.
Hay muchas cosas para decir de este producto, por ejemplo la mezcla de colores que había en el grupo de amigos, ¿qué diría Adolf si viera a un negro, una china, dos latinos, juntandosé con un par de arios? Se quitaría el bigote de rabia.
Pero lo que más me llama la atención de El fantasma escritor, es qué ha pasado con esos muchachitos: si lograron trascender en el mundo del espectáculo o están atendiendo una ferretería en Lanús.
Por eso, Ave Investiga ha dedicado años a la búsqueda mundial de estos (ya no tan) jovencitos, rastreandolós por aire, mar y tierra hasta conocer qué fue de sus vidas, cuánto calzan y en qué barrio, finalmente, está la ferretería.

Aquí están, acompañados por foto aunque de muchos no pude conseguir imagen actual:

Blaze Berdahl (Lenni, la morocha que cantaba, estaba linda según recuerdo.)
Actualmente tiene 29 años. La siguió luchando con la actuación, pero sin mucho éxito. Lo más resonante, dentro de todo, fue una participación en un capítulo de Third Watch. Por las dudas si no la pegaba, le puso pilas a la universidad y es por eso que hoy ostenta dos títulos, uno en Ciencias Económicas y otro en Ciencias Políticas (no sé si es licenciada o qué, nunca entendí bien la educación yanqui).

David López (Alex, los papás tenían tipo un almacén.)
Este fue el que menos hizo, creo. Pese a que el equipo de Ave Investiga estuvo siguiendoló sin tregua a ver en qué andaba, sólo pudimos averiguar que cumplió 30 este año y prestó su voz en 2004 para el videojuego GTA San Andreas. Aunque no creo que pueda vivir sólo de eso, seguro es narco o vende pelopinchos ilegales.

Mayteana Morales (Gaby, la hermana menor de Alex. Al igual que los papás de su hermano, los suyos también tenían un almacén.)
Esta chica, que maneja un español fluido, sí ha conseguido vivir del mundo del espectáculo, si bien no es una artista de renombre. Tiene un título en arte dramático de la Universidad de Nueva York, y una banda, 7 & Counting. Igual se comenta en el ambiente que podría invertir en una cadena de heladerías en el partido de La Matanza, para tener asegurado el mango.

Tram-Anh Tran (Tina, la chinita.)
Típico de nuestra cultura, calificar de "chinito" a cualquiera con los ojos rasgados. Bueno, esta flaca no es china, nació en Vietnam. Tiene 30 años, y no volvió a robar en el medio artístico, sino que estudió finanzas en la Penn State University. Y se recibió. Pero Tram-Anh Tran no teme: si le va mal con las finanzas tiene la posibilidad de poner un mercado chino (ya sé que es vietnamita, ya sé).

Sheldon Turnipseed (Jamal, el negrinho.)
Cumplió 32 años hace poco. No hizo nada resonante televisivamente hablando, pese a que tenía cualidades y había ganado algún que otro premio cuando niño. Hoy se debate entre ser líder de grupo en los Boy Scouts y lanzar su propia línea de perfume francés. Sigue adelante Sheldon, los espíritus te guiarán.

Todd Alexander (Rob, uno que cayó después, como cuando en Tomy & Daly agregan a Poochie.)
También con 32 años, actualmente sigue metido en el show business pero del otro lado de las cámaras: es escritor y productor. Se puede decir que afana dignamente en lo que le gusta sin tener que rebajarse a ser operario de fábrica o luchador grecorromano. Una vez hackeó la página de la Warner Bros.





De esta manera, vemos cómo El fantasma escritor, lejos de actuar como semillero y dar al mundo increíbles actores que revolucionaran nuestros sentidos, signó la vida de esos chicos (seguro en el colegio los volvían locos, pobres) y los hizo creer que podían seguir viviendo de las cámaras. Algunos lo lograron, los otros siempre tendrán la chance de meterse a Gran Hermano o aparecer en lo de Rial declarando su homosexualidad. Las puertas están abiertas.

miércoles, 4 de noviembre de 2009

Alumbrado Barrido y Limpieza

Cerca de un año de no expresar mi estupidez interna en la red de redes, provocó que ésta no tuviera válvula de escape en mi cuerpo y todo derivó en un tumor testicular. Si bien al principio era divertido, porque me ayudaba en el deporte (se entiende: ponía más huevo..), un médico me dijo en la cola de menos de diez unidades del supermercado que ese loco tumor podía ocasionarme problemas.
¿Qué mierda se tiene que meter en mi vida ese desconocido, que aprovechó mi consternación por lo que dijo para ponerse adelante mío en la fila? A veces creo que soy demasiado inocente, como cuando le presté la bici a ese chico de gorrita y campera de Defensa y Justicia para que fuera a comprar una bolsa de no sé qué. Lo esperé durante seis horas, y no volvió. Pero bué, capaz se perdió, francamente no creo que tuviera mala leche.



La cosa es que finalmente accedí a quitarme el tumor. Por suerte el cirujano me extirpó por error el huevo derecho así que cobré un jugoso juicio por mala praxis. Sí, tengo un huevo solo, pero me salvo de laburar por dos o tres años. Porque como dice Mel Gibson cada vez que nos juntamos, "nada es gratis en la vida".
El temor a quedarme sin el otro testículo y perder mi poderosa voz, me hizo tomar cierto grado de conciencia y decidir la adquisición de algún espacio web para que toda la boludez que circula por mi interior pueda salir y tomar forma en algo mínimamente productivo, aunque más no sea para que nuestro viejo amigo Billy Puertas gané más, aún más dinero.
De esta manera queda inaugurado el presente blog, en el cual se verán las más variadas porquerías que harán que pierdan toda esperanza en el futuro de la raza humana. Brindemos por ello.

martes, 25 de agosto de 2009

Hermosa lección



La carrera universitaria que estoy llevando a cabo me permite conocer gran cantidad de gente, de las más variadas procedencias, ideologías, colores, religiones y números de calzado. Con ellas comparto trabajos, aulas, o, al menos, pasillos.

Pero he de referirme aquí a una en particular, una muchacha. No sé su nombre, ponele que se llame "Estacióndeserviciocontresrampas". ¿Eh? No, pará, es muy cualquiera. Pongamoslé por nombre "Ángeles". Sé de ella que es de la provincia de Río Negro, nada más.



Ángeles y yo cursamos juntos una materia en la que nos enseñan, básicamente, a escribir textos argumentativos. Sí, pueden decir que no le he sacado el jugo a la asignatura y sigo escribiendo como un cavernícola, y de los más brutos; me importa un carajo, a mí la materia me gusta.

Pero no nos desviemos, por favor. Ángeles siempre llamó mi atención por su aspecto físico, que no se adecua ni por asomo a los estándares de belleza más comunes en estos tiempos.

Para empezar, su gran estatura (cercana al metro ochenta) y su andar desgarbado y carente de elegancia la convierten en un Juan Martín Del Potro versión femenina, que parece que fuera a tropezar con cualquier obstáculo del camino.

Luego está su pelo, del color y sensación al tacto de la paja. Esto último lo intuyo al mirarlo, no quiero decir que ande tocando cabelleras ajenas. El otro problema de este pelo es que no alcanzará jamás a cubrir unas enormes, dumbescas orejas que por su forma y tamaño, casi perpendiculares a la cabeza, podrían sin esfuerzo recibir todos los canales de DirecTV.

Finalmente, su largo y angosto rostro tiene como centro una nariz que constituye lo más parecido que vi en mi vida a una berenjena. Estoy en condiciones casi científicas de afirmar que nunca le faltará el aire.

De todas maneras me queda la sensación de haberme quedado corto en mi descripción; deberían verla para tener una idea más cabal de lo que digo.

Cierto día, me dirigía a pie a la facultad a cursar la materia que mencioné antes, esa de escribir textos de opinión. Andaba rápido, como siempre que voy solo, y de pronto me encontré detrás de Ángeles, que caminaba llevando su bicicleta al costado mientras charlaba con amigos. Aminoré la marcha y recorrí las dos cuadras que quedaban hasta la facultad riéndome en silencio del andar simiesco de Ángeles.

Entramos al aula, y antes de comenzar la clase, el profesor destacó un texto formidable escrito por un alumn@ que había argumentado en forma excelente su opinión, texto que podía, tranquilamente, ser publicado.

Instantáneamente miré a todos mis compañeros, tratando de imaginar de quién sería; obviamente no se trataba de mí. Enorme fue la sorpresa del curso entero al escuchar que el autor misterioso era nada menos que Ángeles. El profesor leyó el texto en voz alta y sí, realmente era bueno. La fea, la que no se ajusta a los parámetros de belleza, estaba demostrando que tenía cualidades, y de las importantes, mientras los lindos seguíamos escribiendo boludeces.

Hoy volvía a casa recordando aquel episodio, pensando en lo estúpido de juzgar a la gente por su aspecto físico sin considerar qué hay en su mente, o en su corazón. Realmente estaba reflexionando y convirtiéndome en una mejor persona.

Pero, de repente, a diez metros de la puerta del edificio en que vivo vi bajarse de un auto a un enano a quien le faltaba una pierna, y no pude evitar cagarme de risa por varios minutos. Una lástima; Ángeles me había enseñado una hermosa lección, pero yo no la aprendí.

jueves, 9 de abril de 2009

La soledad es la gran talladora del espíritu

Describí lo que siente una hormiga en el instante en el que recibe el impacto de una gota de lluvia sin utilizar las palabras: hormiga, lluvia y agua.


La pequeña obrera corre apurada hacia el hormiguero. Sin querer se alejó de su fila, por distraerse con esas flores tan bonitas que sólo pudo observar, pero no cortar. Ahora, debe llegar rápidamente a su hogar, antes de que el oscuro cielo cubierto de nubes haga efectiva su amenaza de precipitaciones. Ya perdió de vista a sus compañeras, su única oportunidad de volver a su casa es usando su olfato aunque lo único que puede sentir es el olor a humedad, signo indefectible de que el cielo caerá sobre su cabeza.

De repente, sucede lo más temido: una luz enceguecedora ilumina aquella pradera, seguida del trueno más fuerte que jamás ha escuchado. Apresura el paso pero ya es demasiado tarde. Las gotas caen a su alrededor como bombas y no hay zigzagueo que pueda evitarlas. Una de ellas impacta de lleno en la cabeza del insecto, que siente cómo de a poco va perdiendo la sensibilidad de sus patitas. Segundos más tarde pierde el conocimiento mientras se hunde lentamente en el barro.

Despierta al día siguiente, bajo un luminoso sol matutino. Intenta mover sus patas, pero sólo le responden las dos posteriores. Valiéndose de ellas se arrastra por el barro seco hacia su hormiguero, y al llegar encuentra un horrible panorama: está vacío. Seguramente sus compañeras lo abandonaron ante el peligro caído del cielo.

Esto le quita todas las fuerzas, y se deja caer entregada a su destino. Triste final para un insecto social como ella, morir sola e inválida, junto a su viejo hogar.

martes, 17 de febrero de 2009

Lüge

 “Man muss eine Lüge nur sooft wiederholen, bis man selber daran glaubt”
Joseph Goebbels, ministro de propaganda nazi









"¡Qué calor!" se quejaba la Señora R. mientras pensaba cómo distribuir las bolsas de sus compras para que le pesaran menos. Hacía un par de días que el sistema principal de aire acondicionado del shopping se había roto y no vendrían a repararlo hasta el lunes, así que para ese sábado ya ni se podía respirar bajo aquel denso calor de enero.

La Señora R. decidió no quedarse a ver vestidos para analizar cuál usaría en el casamiento de su hija, total faltaban cuatro meses y ya no soportaba ese calor penetrante. Enfiló hacia la puerta pensando únicamente en subirse a su camioneta, prender el aire y llegar lo antes posible a su casa para quedarse toda la tarde en la pileta.

Pero al cruzar la puerta, además de aumentar más el calor, algo llamó su atención. Un hombre en silla
de ruedas tocaba la guitarra y cantaba "A Hard Day's Night" de Los Beatles bajo ese abrasador sol de verano. Estaba bien aliñado; no se asemejaba a la mayoría de los mendigos que andaban por allí. Pensó que tal vez era sólo un artista expresándose o, quizás, una víctima de una lesión medular o algo por el estilo que le impedía mantenerse erguido (tenía sus dos piernas) y de esta forma buscaba el sustento para su familia. Como fuere, sin dudas tocó su corazón y decidió dejarle diez pesos, a falta de cambio. El hombre sonrió y saludó con su cabeza, sin dejar de cantar.

"¡Cómo se nota que estas viejas no saben qué carajo hacer con la guita, eh!" dijo para sus adentros José Julio, el guitarrista incapacitado para caminar, mientras terminaba su canción y comenzaba con "Twist and Shout", tristemente asociada a Videomatch. Pero pese a sus reniegos, diez mangos eran una buena forma de comenzar el día laboral y permitían ilusionarse con una recaudación importante.

Sólo fue una ilusión, porque en las siguientes cuatro horas apenas logró reunir la misma cantidad que esa señora llena de bolsas le había dejado. Era bastante comprensible, era un día de calor espantoso y nadie querría encerrarse en un shopping sin aire acondicionado. Así que, cansado y con la garganta gastada de tanto cantar decidió dar por terminado el día. Guardó la guitarra en su funda y atravesó el estacionamiento del centro comercial haciendo girar lentamente las ruedas. Cruzó la puerta de rejas y recorrió dos cuadras, hasta llegar a una zona desierta y oscura, con frondosos árboles que cubrían la calle. Ahí tenía estacionado su Fiesta azul. Se acercó, abrió el baúl para guardar la guitarra y, con total naturalidad, se levantó de su silla de ruedras, la plegó, la colocó cuidadosamente en el maletero y caminó firmemente hasta la puerta del auto para subirse y conducir hasta su pueblo a descansar, al otro día había partido de papi.



El sábado siguiente, José Julio salió temprano de su casa. Le había dicho a Manuela, su mujer, que se iba a jugar al golf con los muchachos del pueblo vecino. Se colocó un buen jean, una buena chomba y partió. Manejó rápidamente los 55 km que separaban su casa de la gran ciudad y se estacionó a unas veinte cuadras del centro, en una placita con unas pocas personas tomando sol. Agradeciendo que el astro estuviese más tranquilo que el sábado anterior, sacó la silla de ruedas del baúl y sentado en ella se trasladó hasta la peatonal.

Vio con alegría una gran cantidad de gente paseando, comprando, comiendo. No dudó que sería un gran día para su bolsillo y entró con seguridad a una casa de lotería, narrando sus falsas desventuras: había sufrido una caída de una escalera, perdiendo la movilidad de las piernas y con esto su trabajo como colectivero, así que sólo le quedaba mendigar por las calles mientras su mujer era empleada doméstica para llevar el pan a la mesa.

Evidentemente José Julio tenía un gran ángel, porque compraba a la gente de tal forma que prácticamente hacían cola para para darle monedas algunos, y billetes otros. Aquel sábado se cansó de recorrer cada negocio de la peatonal y salir de todos ellos lleno de dinero que la gente ingenuamente otorgaba, notablemente conmovida por la historia de este hombre de capacidades diferentes que los cautivaba con su vocabulario y carisma.

Tanto tiempo pasaba en cada local, hablando con los dueños y clientes y efectuando su "recaudación", que la noche lo sorprendió habiendo recorrido apenas media peatonal. Se alarmó un poco pensando qué le diría a su esposa sobre la tardanza, aunque instantáneamente apareció la excusa del asado con los muchachos en el golfito.

Ya más tranquilo ahora, fue despacito hasta su auto, disfrutando el paseo en silla de ruedas, contando el dinero que había obtenido, cercano a las cuatro cifras. También se dio tiempo para ilusionarse con el día siguiente, cuando jugaría la semifinal del campeonato regional de papi fútbol.



El por qué de este particular comportamiento de José Julio Zalayeta era un verdadero misterio. Nadie más que él lo sabía, ni su mujer ni sus dos hijas ni nadie en el pueblo, donde era enormemente respetado y capitán del equipo de papi fútbol del club Defensores. No es que necesitara dinero; dueño de la farmacia más grande sobre la avenida principal, tenía un pasar económico más que aceptable. Simplemente, sin que ni siquiera él supiera por qué, cada sábado desde hacía cinco años se levantaba temprano, inventaba alguna excusa a su mujer y se dirigía a la ciudad. Allí, en distintos puntos cada semana, se montaba en la silla de ruedas que había obtenido a través de su negocio y se dedicaba a reunir dinero a fuerza de mendigar dando lástima.



El sábado siguiente arrancó como cualquier otro, con José Julio partiendo a la gran ciudad. Estaba dispuesto a cubrir la otra mitad de la peatonal y volver cuanto antes a su casa para acostarse temprano, al otro día debía jugar la final del torneo y quería estar diez puntos.

Dejó el auto en la misma placita del sábado anterior y se dirigió a la peatonal, donde encontró un panorama similar a su visita previa. Así que sin perder tiempo se adentró en el primer local que tuvo a su alcance.

Continuó con su historia del ex colectivero ahora inválido, con la que siguió cosechando buen dinero. Pero esta vez se entretuvo menos con la gente, estaba apresurado por llegar a su casa y descansar para el partido.

Fue así que terminó rápidamente su labor y sin demorar un instante fue hasta el auto con el que llegó a su casa justo para cenar. Comió liviano y se puso a preparar el bolso para el día siguiente, el gran día, el de la final del torneo regional en el que en numerosas oportunidades había sido artífice de la victoria de su equipo.

Se fue a dormir temprano, y soñó con el gol que haría en el último minuto para arrebatar la copa a Unión y Justicia, el rival de toda la vida.



José Julio Zalayeta despertó a la mañana siguiente entusiasmado. Palpó la cama al lado suyo buscando a su esposa Manuela para un beso de la buena suerte, pero no había nada sobre el colchón más que él.

Quiso bajarse de la cama, pero cayó al piso en el intento.

"Qué boludo, todavía estoy dormido. A ver si me pongo las pilas para el partido." Trató de levantarse del suelo, pero las piernas no le respondían. No es que estuviera cansado o agarrotado: No, no las sentía. Extendió sus brazos para masajearse las piernas, quizá faltara irrigación.

Fue ahí que comprobó horrorizado que lo que faltaba no era irrigación, sino sus piernas. Su anatomía terminaba en dos muñones un poco más arriba de donde deberían estar sus rodillas.

No pudo pensar en nada. Sólo atinó a gritar llamando desesperado a su esposa o sus hijas, pero sólo obtuvo silencio como respuesta.

Resignado y empapado en lágrimas, todavía sin entender nada, se arrastró hasta su auto y a duras penas sacó la silla de ruedas del baúl. Con un enorme esfuerzo se montó en ella y emprendió lentamente el camino al club, deseando no llegar tarde a ver la final.

martes, 6 de enero de 2009

Noche de naufragio

Comenzó sin buscarlo, como una absurda casualidad del universo donde la lógica quedaba en el más último de los planos. A poco de empezar vio su fin siendo nada más que una ráfaga, un recuerdo que se vuelve más difuso día a día confundiéndose con un sueño y sembrando la duda de si fue cierto o no. Ratones asustados hacían girar con fuerza las ruedas para intentar vanamente acelerar el paso del reloj. O tal vez sucede que el reloj no es más que una mentira, una fachada para ocultar la verdadera naturaleza de la realidad y mostrarla como algo lineal e imposible de retomar una vez que se abandona. Lo único cierto aquí fueron los días y días añorando lo que nunca había pasado, perdiéndose en abismos azulverdosos infestados de fantasmas con sus alas rotas. Indignación, impotencia, enterándose de la peor forma que no es sólo el golden gate lo que hace grande a san francisco. Nadar sin rumbo, aferrado a la búsqueda de la justicia, demuestra ser la única manera de permitir que esa vieja valija se hunda lenta pero incesantemente en ese profundo e inhóspito mar al que no habrá regreso. Ahora sí puedo decir adiós.